Tajima Motor lanzó al mercado el nuevo monoplaza Mini Sport EV a un precio de U$S 25.000 (hay que sumarle el costo de las baterías).
El Mini Sport EV tiene un peso muy bajo de unos 272 Kg, usa baterías de plomo ácido (U$S 2500 adicionales) o de polímero de litio (U$S 4.300 adicionales), con autonomías de 25 Km y 90 km respectivamente (manejado a 40 Km/h de promedio) y su velocidad máxima es de 70 Km/h.
El Mini Sport EV tiene un peso muy bajo de unos 272 Kg, usa baterías de plomo ácido (U$S 2500 adicionales) o de polímero de litio (U$S 4.300 adicionales), con autonomías de 25 Km y 90 km respectivamente (manejado a 40 Km/h de promedio) y su velocidad máxima es de 70 Km/h.
Claro, hay que tener en cuenta que no fue pensado para altas prestaciones, al menos por ahora. Pero habrá que ver que sucede con la versión de dos asientos que Tajima piensa construir. Con respecto a su diseño, podemos decir que muestra formas aerodinámicas, aunque creo que su respaldo no debe favorecer mucho su coeficiente Cx. Sus ruedas son las de una moto, y su tamaño general lo encuadran más como un derivado de la motocicleta que un deportivo en si. Se le incorporaron amplios tomas laterales, que están bien diseñados y además le quedan muy bien; le dan ese aire de deportividad al Mini Sport EV.
Pienso que su targuet es más para personas que deseen diversión y llevar los pelos al vientos, pero nunca se sabe a dónde puede llegar un concepto de este tipo, y la historia presenta más de un caso. Sin embargo, le sugeriría humildemente a Tajima Motors que baje sus precios (que oscilan entre 27.500 y 29.300 dólares) o en todo caso que mejore sus prestaciones si desea insertarlo con éxito en el mercado, y ni pensar en el tema exportación. Las comparativas con otros vehículos de su nivel le jugarán en contra. Pero aplaudo la iniciativa, dado el alto riesgo que conlleva esta industria.
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