El Vaticano presentó hoy los dos automóviles eléctricos que la casa francesa Renault le regaló a Benedicto XVI, uno de los cuales se destinará para uso del pontífice en la residencia de Castel Gandolfo y el otro lo usará la Gendarmería Vaticana para los servicios de seguridad del Pontífice.
Los automóviles, que fueron rediseñados sobre la plataforma del modelo Kangoo Maxi., se entregaron a Benedicto XVI en Castel Gandolfo (unos 30 kilómetros al sur de Roma) donde pasa este tiempo de verano. El Papa ya se subió a uno de ellos y dio un pequeño paseo por los jardines de ese palacio pontificio.
El portavoz vaticano, Federico Lombardi, dijo que la decisión de ofrecer al Papa un automóvil eléctrico forma parte de un proyecto sobre movilidad sostenida nacido junto a Renault". "Los que seguimos al Santo Padre sabemos su preocupación por la defensa del medio ambiente", agregó Lombardi.
El presidente de Renault, Carlos Ghosn, fue el encargado de entregar al Papa los dos vehículos en Castel Gandolfo, donde dijo asimismo que "con este regalo a Su Santidad, Renault renueva su compromiso fuerte y perenne por un desarrollo sostenible y respetuoso de nuestro medio ambiente", según un comunicado de la compañía emitido en París.
El Papa le agradeció personalmente al presidente de Renault quien le entregó los dos vehículos cien por ciento eléctricos. El que utilizará el Papa es de color blanco, con los asientos de piel blanca y con el escudo pontificio en las portezuelas. Mide 4,6 metros de largo y 1,8 metros de ancho. Dispone de un motor eléctrico de 44 kw (60 CV) y una batería de iones de litio que le asegura una autonomía media de 170 kilómetros.
El segundo ejemplar, del mismo modelo, es de color azul -el mismo que la Gendarmería Vaticana, al que va destinado- y lleva una banda blanca y amarilla, los colores de la bandera del Vaticano.
Fueron transformados por el carrocero francés Grua. Los dos automóviles disponen de cuatro asientos, los dos posteriores individuales y confortables.
Los vehículos son descapotables, para permitir al Pontífice ponerse de pie y saludar a los fieles, disponen de una gran superficie abierta y una butaca eléctrica para permitir un acceso fácil a bordo.
Para poder usarlos, el grupo eléctrico italiano Enel instaló seis puntos de carga, tres dentro del Vaticano y otros tres en la residencia de Castel Gandolfo. La casa automovilística alemana Mercedes-Benz, por su parte, tiene previsto regalar a Benedicto XVI un "papamóvil" ecológico, con un motor híbrido, aunque de momento se desconoce cuándo se lo entregará.
Fuente: EFE.